El menor permaneció en observación toda la noche y fue dado de alta la mañana de este lunes con tratamiento y recomendaciones médicas.
Un menor de seis años fue ingresado al Hospital General de Los Mochis luego de ingerir de manera accidental el líquido de una batería de control remoto, hecho que generó alarma en su familia.
El incidente ocurrió la mañana del domingo, cuando el niño, identificado como Ismael, mostró cambios en el color de su lengua y comentó a su madre que había mordido una batería. Ante el riesgo, sus familiares lo trasladaron de inmediato al hospital.
En el área de urgencias pediátricas, el menor presentaba dolor en garganta y estómago, por lo que fue atendido con medicamento para mitigar las molestias y sometido a estudios de laboratorio y radiografía.
Los resultados no mostraron complicaciones internas, sin embargo, el personal médico determinó mantenerlo en observación durante toda la noche.
El director del Hospital General, Jaime Astorga Mendoza, informó que el niño permaneció consciente, tranquilo y sin síntomas graves.
Finalmente, la mañana de este lunes fue dado de alta con tratamiento a base de omeprazol y bajo la instrucción a sus familiares de vigilar cualquier signo de alarma.
Astorga Mendoza hizo un llamado a la ciudadanía para extremar precauciones y mantener fuera del alcance de los niños todo tipo de objetos que contengan sustancias químicas peligrosas, como baterías de dispositivos electrónicos, para prevenir accidentes de este tipo.